En la sesión extraordinaria realizada el lunes 2, Rondón Fudinaga aclaró que solo ha solicitado sendos reportes ‘crediticio’ y de ‘operaciones sospechosas’ de más de 20 personas involucradas en el caso que ese grupo de trabajo legislativo tiene a su cargo con facultades de comisión investigadora otorgadas por el Pleno del Congreso.

La decisión del titular de la Comisión de Fiscalización fue cuestionada por el congresista Daniel Abugattás (NGP), por considerar que esos reportes habían sido solicitados como una ‘decisión personal’ del titular de la Comisión, ya que no había sido aprobada en ninguna sesión del grupo legislativo, por lo que consideró que se estaba “festinando todos los trámites”.

El congresista oficialista fue respaldado por su colega Yehude Simon (PP), quien también se mostró extrañado por ese pedido a la SBS, ya que en ningún momento se había planteado pedir ese tipo de informes.

Abugattás y Simon coincidieron en afirmar que ese procedimiento ‘viciaba’ la investigación en curso, ya que podría alterar el debido proceso que se debe seguir en este tipo de casos.

El tema salió a relucir durante el debate que se suscitó a raíz de la negativa de dos invitados a responder a las preguntas de los congresistas en torno a las agendas, en ambos casos por haber rendido sus respectivos testimonios en la Segunda Fiscalía Supraprovincial que investiga casos de lavado de activos, según argumentaron.

El primero de ellos, Jorge Chang Soto, debía informar sobre su participación en la empresa Todo Graph, desde su constitución hasta la transferencia de sus acciones, sus actividades como personero del Partido Nacionalista del Perú en el 2007, su colaboración en actividades en el campo de las telecomunicaciones y otras relacionadas con las supuestas agendas.

El testigo dijo que se ratificaba en todo lo dicho por él en las comisiones investigadoras del ‘Caso Àncash’ y del ‘Caso Martín Belaunde Lossio’, además de la Fiscalía, y no pensaba repetir sus declaraciones porque, según dijo, estas eran “distorsionadas por los medios”, dañando su imagen y la de su familia.

Igual silencio guardó la testigo Maribel Vela Arévalo, dirigente del Partido Nacionalista, quien presidió el primer consejo directivo de la ONG Prodin, creada por Heredia Alarcón.

El tercer invitado fue el excongresista Álvaro Gutiérrez Cueva. No dio explicaciones por su inasistencia.

Los testigos fueron conminados a declarar, sin éxito, por los congresistas Héctor Becerril, Alejandro Aguinaga y Julio Gagó (FP), quienes calificaron ese silencio como una ‘estrategia’ dirigida por la primera dama para frustrar las investigaciones.

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