Posturas a favor y en contra de la propuesta de invertir 3500 millones de dólares en la eventual compra de aviones de combate, acompañadas con la preocupación unánime de que las adquisiciones de armamento se realicen con transparencia, fueron los principales puntos que los integrantes de todas las bancadas plantearon al ministro de Defensa, Walter Astudillo Chávez.

Fue durante el debate que prosiguió a las respuestas ofrecidas por el ministro al pliego interpelatorio planteado en la Moción de Orden del Día 13798, que giró en torno a temas como la anunciada compra de aviones de guerra, compra de un avión presidencial, el traslado de internos de alta peligrosidad al penal de Challapalca, protección de fronteras, seguridad ciudadana y compra de fusiles a Israel.

El congresista Jorge Montoya Manrique (HyD), quien inició el debate, brindó algunas cifras sobre el gasto militar en otros países y dijo que nuestro gasto es mucho menor. “Es el momento de ir recuperando nuestra capacidad de defensa como corresponde. Los países no pueden desarrollar con tranquilidad si no hay una defensa adecuada”, consideró.

De inmediato, Fernando Rospigliosi Capurro (FP) señaló que su bancada respalda a las Fuerzas Armadas (FFAA) y la necesidad de renovar el material obsoleto de estas, “para que estén debidamente equipadas y cumplan con las misiones que le encargue el país”.

“Los argumentos que se esgrimen en contra de la renovación del material, no son correctos; pero, expuso su preocupación por “las irregularidades que existen en ciertas adquisiciones”, acotó.

Luego, Roberto Chiabra León (APP) sostuvo que “una política de Estado es fortalecer la industria de defensa nacional; para lo cual, los tres servicios SEMAN (Servicio Especializado en Mantenimiento Aeronáutico), SEMAE (Servicio de Mantenimiento Aéreo del Ejército) y FAME (Fábrica de Armas y Municiones del Ejército peruano) deben tener las capacidades y competencias que puedan desarrollar y crecer.

Por su parte, Flavio Cruz Mamani (PL) hizo un análisis comparativo de lo que podría construirse: hospitales, centros de salud, colegios, con la cantidad de 3500 millones de dólares que se destinarían para la eventual compra de aviones de guerra.

A su vez, Edgar Tello Montes (PP) manifestó que “aquí lo que se cuestiona no es la gestión, sino que las compras sean transparentes, y no haya visos de irregularidades. Ese es el punto central que genera preocupación”.

Por otro lado, Alex Paredes Gonzales (BMCN) sostuvo que “para quienes somos parte de la función pública, hay acciones que son impostergables, los dos momentos en la sesión nos permite entender ese contexto. También mencionó.

Mientras, Bernardo Quito Sarmiento (BS) dijo que “en un país en donde tenemos más allá del 50% de inseguridad alimentaria, querer brillar con aviones, frente a la pobreza que tenemos, evidentemente desdice la realidad, y no se está comprendiendo lo que tenemos que hacer con el poco dinero que se recauda”.

En su momento, Alejandro Cavero Alva (AvP) señaló que “todos en el Congreso estamos de acuerdo en tener bien equipadas a nuestras FFAA para poder cumplir con el mandato constitucional de salvaguardar nuestras fronteras y nuestra soberanía; pero, la forma en que se está planteando, gastar 14 mil millones de soles no es la adecuada”.

A su vez, Isabel Cortez Aguirre (BDP) expresó que “defender la patria implica tener prioridades; es cierto que debemos estar preparados para defender el país del enemigo exterior, pero se van a gastar 14 mil millones. ¿Cuántos centros de salud y colegios se podrían construir con este dinero?”, preguntó.

Finalmente, Alejandro Muñante Barrios (RP) dijo que hay una coincidencia en que el equipamiento de las FFAA es obsoleto, pero el cuestionamiento es si el momento es oportuno o no; lo cierto es que hay una mala distribución de nuestros recursos. “Aprovechemos la ley de presupuesto para poner una veda a las consultorías y coloquemos esos recursos donde realmente se necesitan”, concluyó.

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