Con la recomendación para que su informe final pase a la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales y se investigue si los expresidentes del Consejo de Ministros, Mirtha Vásquez y Aníbal Torres tuvieron una conducta acorde a los parámetros legales, la comisión investigadora a cargo del tema, entregó lo actuado sobre el derrame de petróleo ocurrido el 15 de enero del 2022 en Ventanilla.

Así lo hizo público la congresista Margot Palacios, presidenta de la comisión investigadora del derrame de petróleo -Repsol: impactos, consecuencias y responsabilidades, durante un acto público que se desarrolló en el auditorio “Alberto Andrade Carmona”.

Al Poder Ejecutivo le recomendó impulsar acciones de coordinación y articulación política entre las diferentes entidades públicas que son competentes para atender los impactos ambientales y sociales derivados del derrame de petróleo.

Al Ministerio de Ambiente, promover la restauración de los ecosistemas marinos y costeros afectados por el derrame de petróleo, coordinado y articulando la disposición de medidas complementarias con las autoridades competentes.

A la empresa Refinería la Pampilla S.A.A. (RELAPASAA), levantar las observaciones de los planes de rehabilitación, así como ejecutarlos e implementarlos, una vez aprobados, en los 71 sitios, 2 áreas naturales protegidas, 6 Islas e Islotes y Zona Submareal afectados por el derrame, cumpliendo con todas las exigencias establecidas por ley.

Entre las principales conclusiones a los que arribó la comisión, la congresista Palacios dijo que el derrame tuvo un impacto devastador en el ambiente y en la población del litoral peruano.

Señaló que la razón del accidente fue una mala práctica de descarga, que no tuvo en cuenta los estándares de maniobra y que probablemente, no consideró el peso del material que cargó en mayor cantidad a la permitida.

El accidente petrolero afectó a las playas de Costa Azul, Bahía Blanca y otras del distrito de Ventanilla, produciendo graves perjuicios a la flora, fauna, pesca, turismo y actividades económicas. Más adelante el daño alcanzó a los distritos de Chancay, de Santa Rosa, Ancón y Aucallama (Huaral).

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