El presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, Ernesto Bustamante Donayre (FP), expresó su desacuerdo con los alcances de la exposición del canciller, Óscar Maúrtua, quien explicó las relaciones peruano-venezolana, el reconocimiento del Gobierno de Nicolás Maduro y la instalación de un consulado de Bolivia en Cusco.

Fue luego de la presentación del ministro de Relaciones Exteriores, Óscar Maurtua, que se llevó a cabo en la sala Raúl Porras Barrenechea y se desarrolló con la asistencia presencial y virtual de los legisladores miembros de ese grupo de trabajo.

Bustamante Donayre coincidió con el canciller respecto a la hermandad que existen entre el pueblo peruano y el venezolano, “pero nos preocupa seriamente que, en su legítimo derecho de legación, se haya dado una especie de reconocimiento o de legitimidad al régimen de Nicolás Maduro”.

“Hace once meses, el Perú afirmó que el Gobierno de Maduro era ilegítimo, junto con los demás países del Grupo de Lima. Además, nuestro país lo denunció ante la Corte Internacional como violador de los derechos humanos y de haber cometido delitos de lesa humanidad. ¿Cómo es posible que se restablezca relaciones a nivel de embajada?”, preguntó.

De igual manera cuestionó que el Gobierno haya pretendido que el ex jefe de campaña electoral de Perú Libre, Richard Rojas, sea el embajador peruano en Caracas. “Nos preocupa que el expresidente Evo Morales venga al Perú como si fuera su casa, utilizando vehículos y seguridad del Estado. Lo que pretende es escindir el sur peruano para instaurar una nación aimara. El Perú es una república unitaria. No vamos a permitir que Puno, Cusco o el sur se pliegue a estados plurinacionales”, afirmó.

Por su lado, la congresista María Cordero Joy Tay (FP) sostuvo que “fue una pésima decisión la designación de Rojas Gómez como embajador, la que felizmente no prosperó por intervención del Poder Judicial. Es un error el reconocimiento peruano al Gobierno venezolano. Debe corregirse”, anotó.

A su turno, la legisladora Silvana Robles Araujo (PL) intervino para afirmar que la Comisión de Relaciones Exteriores “se ha convertido en un instrumento de seguimiento de la política exterior, sabiendo que este tema es una prerrogativa constitucional del presidente de la República. Por prejuicios ideológicos de algunos congresistas, a estos no les gusta ver otros temas, como el no cumplimiento de tratados suscritos por el Perú”, manifestó.

El canciller Maúrtua de Romaña recordó que, en la sexta cumbre presidencial realizada en México y a la que asistió el presidente Castillo, se afirmó que el Perú sostendrá relaciones diplomáticas con todos los países de América Latina y el mundo, “por encima de diferencias ideológicas o políticas. El Perú rechaza vincularse a bloques ideológicos de cualquier signo y no se condicionará a modelo de otros países”.

Asimismo, explicó que a la fecha ningún país de la región, salvo Paraguay, ha roto relaciones diplomáticas con Venezuela. Y respecto al caso de Rojas Gómez, indicó que su designación para que sea embajador en Caracas fue una potestad del jefe del Estado.

Respecto a la instalación de un consulado de Bolivia en Cusco, explicó que se guía por los flujos de personas y turismo “sin incurrir en asuntos internos”.

Además, el canciller Maúrtua explicó a los congresistas que nuestro país sí participó en la cumbre mundial COP 26 realizada en Glasgow (Escocia) con una delegación de 25 personas, encabezada por el viceministro de Ambiente, Wilfredo Mamani.

Esto último llamó la atención del congresista Bustamante Donayre, quien aseveró que en ese certamen internacional participaron 120 jefes de Estado “y un viceministro no tiene capacidad de decisión”.

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