Así lo señaló durante la mesa de trabajo sobre la Academia de la Magistratura que se realizó el martes 12. El parlamentario convocó a representantes de la Corte Suprema de la República, del Ministerio de Justicia, del Tribunal Constitucional, de la Academia Diplomática del Perú Javier Pérez de Cuéllar y de la Academia Militar, entre otros, para recibir sus opiniones respecto del proyecto de ley de reforma constitucional sobre la Academia de la Magistratura.

“Se trata de un segundo proyecto más ambicioso que el primero que presenté y que todavía no ha sido discutido en la Comisión de Constitución. La idea es que la Academia de la Magistratura sea la puerta de ingreso a la carrera fiscal y judicial”, dijo el legislador.

Recalcó que se está tomando como modelo la Academia de la Magistratura española y francesa. “En el Perú, hasta hoy la Academia imparte cursos y toma evaluaciones para los ascensos y para quienes dan examen, pero no selecciona, forma y califica a los que van a iniciar una carrera fiscal y judicial. Creemos que esa debería ser la función que debe tener”.

Durante la reunión, Costa subrayó la importancia de seleccionar a los mejores abogados, formarlos durante un año y un año más de prácticas para que luego sean calificados los que están aptos para ingresar a la carrera fiscal.

En la reunión intervino Ricardo López, de la Academia Diplomática del Perú. Informó sobre cómo es el proceso de admisión de los aproximadamente 429 postulantes cada año, de los cursos y clases que reciben en los dos años de estudios.

A su turno, el Juez Supremo, Héctor Lama More, en representación de la Corte Suprema de Justicia, observó que en los últimos años el Consejo Nacional de la Magistratura varió los reglamentos de admisión otorgándole mayor puntaje al currículum vitae y mejor puntaje a la formación en la academia y viceversa.

“Se han dado modificaciones a las reglas del juego hasta 15 días antes de las evaluaciones Necesitamos reglas claras”, subrayó el letrado.

Entre otras opiniones de los participantes fue resaltada la importancia de que todo aquel que aspire a ser juez o fiscal debe haber pasado previamente por una evaluación cualitativamente importante de la Academia de la Magistratura.

Con ello coincidió el congresista Gino Costa quien reafirmó que la misma debe ser la puerta de ingreso a la carrera fiscal y judicial que ahora no se da.

Fue puesta en debate la importancia de la independencia de la Academia de la Magistratura También se cuestionó si la selección, formación y nombramiento se concreta en la academia o se comparte con el Poder Judicial o la Junta Nacional de Justicia.

Se discutió sobre si los años en la Academia constituyen parte de la formación del aspirante y si también se debe incluir la práctica profesional. Otra arista fue si la Academia debe responder a los requerimientos del Ministerio Público y del Poder Judicial, es decir si es absolutamente receptiva a esos requerimientos.

Finalmente se puso sobre la mesa de debate si la Academia debe priorizar la formación de jueces y fiscales o también de asistentes, auxiliares de justicia y eventualmente jueces supernumerarios.

PRENSA CONGRESO