Congreso entregó cheque blanco al Ejecutivo
30 Nov 2023 | 16:24 h
El presupuesto para el año 2024, aprobado en el Congreso, se encuentra desfinanciado y se ha incluido disposiciones que, en la práctica son un cheque en blanco para el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y ponen en riesgo la promoción de las inversiones públicas y la reactivación económica, así como le da facultad al gobierno para realizar modificaciones presupuestales sin rendir cuentas al Parlamento.
Así lo advirtió el congresista José Luna Gálvez, al sustentar su voto en contra a la Ley de Presupuesto, al señalar que ya había demandado, mediante el oficio 133-2022-2024/JLLG-CR, a la Comisión de Presupuesto, el retiro de cuatro disposiciones complementarias de la norma.
El expresidente de la Comisión de Presupuesto explicó que el MEF no ha corregido los supuestos macroeconómicos, demasiado optimistas pese a la crisis y recesión que enfrentamos y que podrían agravarse con la desconfianza empresarial, los conflictos políticos y sociales y el advenimiento del Fenómeno El Niño.
“Los supuestos macroeconómicos para el presupuesto del 2024 no se van a cumplir, al igual que no se han cumplido en el presupuesto de este año; estamos ante un presupuesto desequilibrado. Nuestro temor es que, si sigue el incremento del gasto incontrolado con una recaudación a la baja, puede incrementarse el déficit fiscal y la recesión, y el Fenómeno El Niño puede revivir la inflación”, subrayó.
Cheque en blanco
Además, explicó que pidió retirar la Vigésima Primera Disposición Complementaria Final debido a que autoriza al MEF, el 2024, realizar modificaciones presupuestarias, por la fuente de Recursos Ordinarios, a las entidades del gobierno nacional, y de los gobiernos regionales y locales.
“Esto significa un cheque en blanco para que el MEF haga con los recursos ordinarios lo que ellos decidan sin dar cuenta al Congreso y sin el conocimiento de los gobiernos regionales, locales y nacional.
La pregunta es ¿por qué aprobamos en el Congreso el Presupuesto 2024 si el MEF lo va a disminuir, vía modificaciones presupuestarias, una vez iniciado el año 2024, y además puede reasignarlos arbitrariamente?”, sostuvo el parlamentario.
Ineficiencia
De igual modo, Luna Gálvez cuestionó la Vigésima Segunda Disposición Complementaria Final, al considerar que promueve la ineficiencia en la ejecución de gasto. La disposición autoriza al MEF a realizar modificaciones presupuestarias a partir de la información sobre saldos de libre disponibilidad de los recursos ordinarios que deben brindar los pliegos de los gobiernos nacionales, regionales y locales, para transferirlos a la Reserva de Contingencia, para ser usados a discreción del Ejecutivo y sin necesidad de autorización del Congreso, tal como lo estipula la Constitución.
“En lugar de promover la ejecución y calidad del gasto público para contribuir a la reactivación económica, el MEF promueve la lentitud en todas las entidades públicas, al indicarles que, si no ejecutan el presupuesto, el MEF se llevará sus saldos a la Reserva de Contingencia, para su uso discrecional, salvando a las entidades ineficientes de la mala ejecución presupuestal”, recalcó.
Luna Gálvez también cuestionó la Segunda Disposición Complementaria Transitoria, pues con ella el MEF logra que el Congreso autorice a las entidades del gobierno nacional, regional y local modificar, hasta el 31 de enero, su presupuesto institucional, de producirse una modificación en las estimaciones de ingresos que determinen una variación en los recursos.
Luna Gálvez también cuestionó la indiferencia del Ejecutivo para con los programas y organizaciones sociales -ollas comunes, vaso de leche y Qali Warma, entre otros, que pueden convertirse en organizaciones fundamentales para paliar los efectos de la crisis en las poblaciones más vulnerables.
DESPACHO CONGRESAL