Exministra Sonia Guillén se presentó ante Comisión de Fiscalización
Cuestionan contratación de Richard Cisneros para charlas motivacionales en plena pandemia
Centro de Noticias del Congreso
12 Jun 2020 | 15:01 h
Por considerar inoportuna la contratación del Richard Cisneros Carbadillo para brindar charlas motivacionales al personal del Ministerio de Cultura en momentos en que el país y la ciudadanía sufría el impacto de la emergencia sanitaria por la pandemia Covid-19, parlamentarios coincidieron al cuestionar a la exministra de esa cartera, Sonia Guillén Oneeglio, por esta decisión.
“Es una falta de respeto a los millones de peruanos que en plena crisis no tienen un pan que llevarse a la boca”, dijo el congresista Wilmer Bajonero Olivas (Acción Popular); en tanto que Yeremi Espinoza Velarde (Podemos Perú) señaló que “el personal de salud que trabaja todo el día recibe 4 mil soles de sueldo y están en la primera línea de atención en la pandemia, mientras que, el señor Cisneros ha cobrado entre marzo y abril mucho más sin estar en riesgo su vida”, subrayó.
Fue en la sesión virtual que realizó la Comisión de Fiscalización el viernes 12 -dirigidos por su presidente el congresista Edgard Alarcón– iniciando así la investigación en torno al “Caso Swing” para lo cual el Pleno le otorgó facultades de comisión investigadora.
Guillen Oneeglio informó que durante su gestión, Cisneros Carbadillo tuvo dos contratos: el primero a través de la orden de servicios (OS) 00673-2020 del 12 febrero de 2020 que tuvo 45 días de plazo de ejecución por un monto total de 33 mil 400 soles que se pagaron en su totalidad. El segundo fue la OS 01122-2020 del 24 abril 2020 con 45 días calendario de plazo de ejecución por la suma de 30 mil soles.
“En este último caso sólo se canceló 10 mil soles porque el servicio fue resuelto por el área administrativa del Ministerio de Cultura”, dijo la ex funcionaria al tiempo de precisar que el área usuaria fue la Oficina de Recursos Humanos como servicio de organización y ejecución de un evento de integración institucional para el personal del Ministerio de cultura con la finalidad de crear los valores institucionales del ministerio y promover los patrimonios inmateriales, para la primera orden de servicio.
“En el segundo caso, el área usuaria fue la Oficina General de Recursos Humanos para contribuir a mejorar el rendimiento laboral, personal y social de los servidores del Ministerio de Cultura en el marco de un estado de emergencia a consecuencia del brote del Covid-19 durante la cuarentena y la etapa posterior a la misma”, precisó la exministra.
También explicó que a raíz de una denuncia periodística que ponía en cuestionamiento sobre las posibles irregularidades en las consultorías de Cisneros Carbadillo, solicitó información a la administración del ministerio lo que le permitió conocer los términos de referencia e información relevante.
“Me permitió conocer especialmente el Currículum Vitae del citado proveedor percatándome que en algunos entregables consignaba como post firma las siglas DHC seguida de su nombre lo que me causó sorpresa, indignación y malestar”, dijo Guillén Oneeglio al tiempo de precisar que proviene del mundo académico y reconocer que sabe que ese grado no existe, que se trata de una simple designación honorifica y que por consiguiente constituía un hecho irregular, ello junto a la pertinencia y necesidad que ya se cuestionaba por estos servicio.
En razón a los señalado por la ministra, el congresista Edgard Alarcón dijo que “se confirma nuestra hipótesis de que el señor Cisneros no reunía el perfil para brindar el servicio requerido por dicho portafolio” y preguntó a la ministra si las consultorías realizadas por Cisneros tuvieron un impacto relevante para el ministerio a lo que la ministra dijo que se hicieron cuestionarios y evaluaciones de desempeño información que se comprometió a remitir a la comisión.
«Yo no lo contrataría»
En otro momento, la exministra de Cultura dijo que “si dependiera de mí, en vista de las calificaciones del señor, yo no lo contrataría”, sentenció al responder una pregunta planteada por la congresista Nelly Humani Machaca (FREPAP).
Posteriormente, Guillén Oneeglio señaló que el 20 de mayo último remitió a la secretaria general del ministerio un memorándum solicitándole iniciar las investigaciones que correspondan sobre la contratación del señor Cisneros, evaluar el proceso de contratación, la necesidad de la prestación de su servicio y el sustento de las conformidades otorgadas a sus entregables de los contratos durante su gestión.
Dijo que también solicitó -de corresponder- que dispongan la suspensión de la orden de servicio vigente del citado proveedor en tanto duren las investigaciones. “Al día siguiente la coordinadora del equipo funcional de bienestar social de la Oficina General de Recursos Humanos informó a la directora general de la Oficina General de Recursos Humanos que encontrándonos próximos a culminar el periodo de cuarentena recomendaba dejar sin efecto la orden de servicio del citado proveedor”, puntualizó la exfuncionaria.
Durante la reunión el congresista Marcos Pichilingue Gómez (Fuerza Popular) dijo que le preocupa conocer lo que la ministra señala. “Es decir, sino se hubiera hecho pública la contratación de Swing seguro seguía contratando mientras el país tiene necesidades que deben priorizarse a la población como la escasez de medicamentos”.
Opinó que para contratar al «Richard Swing» se crearon las necesidades. “El mundo al revés, no eran las necesidades de la institución, y se adecuaba el perfil y como usted ha señalado firmar con un título no existe. ¿usted no sabía lo que ocurría en el ministerio?, ese es el perfil de los funcionarios que dirigen los destinos del país”, cuestionó Pichilingue.
Por su parte, el congresista Robinson Gupioc Ríos (Podemos Perú) preguntó cómo es que el señor Cisneros resulta favorecido si no está en el presupuesto inicial de apertura ni en el plan anual de contrataciones del sector Cultura.
En su intervención la congresista Carolina Lizarraga (Partido Morado) pidió conocer que medidas adoptó “cuando se enteró del caso por los medios de comunicación y no por su ministerio” para que no se vuela a repetir situaciones similares. Tras señalar que el tema se está viendo en el área administrativa del Ministerio de Cultura, la ex funcionaria aseguró que es el único caso. “No hay otro caso de semejantes características”, concluyó.
Lima, 12 d junio de 2020
PRENSA-CONGRESO