PUTIS DEJARÁ EN EL PASADO AÑOS DE OLVIDO Y VIOLENCIA
Centro de Noticias del Congreso
21 Ene 2016 | 18:36 h
“La distritalización de Putis es sólo un pequeño resarcimiento ante todo el dolor que sufrió esta parte del país durante los años de violencia y terrorismo”, sostuvo el legislador José Urquizo Maggia (NGP), quien promueve y respalda las gestiones del Comité Pro Distritalización de Putis ante las entidades del Estado.
«Es importante reconocer los esfuerzos impulsados por los pobladores para la creación del distrito de Putis, que con toda razón amerita tener su propia administración que le permita construir su propio desarrollo social, cultural y económico», sostuvo el parlamentario.
Los representantes del centro poblado ayacuchano de Putis (Huanta) explicaron que todavía existe la presencia de Sendero Luminoso y hasta ahora no se siente la del Estado. “Por esta razón pedimos la creación del distrito como una reparación de la deuda que tiene el Estado con nuestras comunidades que, en 1984, sufrimos el asesinato de 123 de nuestros pobladores”, sostuvieron Julio Madueño y Gerardo Fernández, representantes del Comité Pro Distritalización.
Alfredo Pezo, representante de la Oficina de Demarcación Territorial de la PCM, explicó que el impulso de este proyecto está dentro del marco de descentralizar las funciones del Estado y dar una mirada diferente a las localidades altoandinas y sus necesidades, para lograr el desarrollo y la paz social en la zona, así como proponer políticas, planes y estrategias de intervención integrales. “El Estado encamina sus esfuerzos hacia este propósito”, explicó.
El desarrollo alternativo ha sido y sigue siendo hasta el momento una herramienta eficaz para suplantar el sembrío de la hoja de coca por el cacao, café y plátano en el sector. Con la distritalización se beneficiaran localidades como: Cayramayo, Rodeo (propuesta como capital de distrito), Atumpampa, Rumichaca, Parobambilla, Canrao, Sayhua, Llamanniyucc, Pedray, Masuancancha, Viscatan Pata, Pampahuasi, Orccohuasi, Ccarcco Pucará, entre otros.
El informe de la Comisión de la Verdad consigna sobre Putis (1984):
“La comunidad de Putis perdió a 123 pobladores en una incursión armada en las localidades Cayramayo, Vizcatampata, Orccohuasi y Putis, en el distrito de Santillana, provincia de Huanta (Ayacucho), fueron víctimas de una ejecución arbitraria llevada a cabo por efectivos del Ejército acantonados en la comunidad de Putis. Los comuneros fueron reunidos por los militares con engaños, obligados a cavar una fosa y luego acribillados por los agentes del orden”.
Contexto sociopolítico
“Entre 1980 y 1982 el PCP-SL desarrolló en Ayacucho una estrategia que combinó acciones de amenazas, asesinatos, sabotajes y propaganda, con una labor política de organización de bases de apoyo con el fin de constituir Comités Populares, destruyendo para ello el sistema de autoridades locales existente. Por ejemplo, en 1982 el alcalde del distrito de Ayahuanco, cercano a la comunidad de Putis, tuvo que renunciar porque había sido amenazado por el grupo subversivo”.